Aceptación corporal y amor propio

Por: Atencion Clientes En: Estilo de Vida Fecha: Cometarios: 0 Me gusta: 1050

 El cuerpo es algo que se cuida: se alimenta, se nutre y se ejercita para que sea cuidado. De aquí nace el amor: piensa en todas las cosas que te ha dado tu cuerpo.

Aceptación corporal y amor propio

 

Hace algunos ayeres comenzó a escucharse el concepto de bodypositive, que es un movimiento que aboga por la apreciación de la diversidad de cuerpos. El término ha evolucionado debido a que, progresivamente, se han encontrado algunos peros al movimiento. Mucho se habla, en este sentido, de lo difícil que es amar el propio cuerpo cuando estamos inmersas en una cultura que basa el trato de las personas en su apariencia. En el ir y venir de trabajar con la imagen corporal, muchas mujeres se sienten mal con su cuerpo, pero a ello se suma la culpa de no amarse como son. Entonces existe una doble culpa por sentir que no se progresa en esto del amor propio.

La aceptación corporal no se trata de levantarte todos los días y sentirte hermosa. Hay, como en todo, días buenos y días malos. En algunas ocasiones podemos despertar y sentir que nos vemos mal, lo que es muy normal cuando se vive en un sistema en el que el trato social tiene mucho que ver con cumplir ciertos estándares de belleza.

Por ello, es importante hablar de la aceptación corporal en cualquier ámbito en que se presente y sin apego a ningún sistema que hable de lo bello, porque la belleza es subjetiva. Nos referimos a que los cuerpos, más allá de si son bellos o no para alguien, son lo que son: el vehículo por el que transitamos en el mundo y nuestro medio de conocerlo a través de la experiencia. Amarlo bajo las condiciones que los estándares de belleza hegemónicos establecen es una tarea casi imposible porque a cada paso hay un defecto que se debe modificar. Pero querer hacer de lado el hecho de que vivir en una culta de las dietas, de gordofobia y de violencia estética ha permeado nuestra concepción de nosotras mismas es imprudente, porque deja el estándar del amor propio con la vara muy en alto también.

El amor no es el mismo para todas las personas, por eso el amor a nuestro cuerpo puede ser distinto para cada una. Lo cierto es que es importante despojarnos de las preconcepciones sociales y caminar hacia la construcción de un propio ideal que guie nuestro trato con nosotras mismas. Es difícil ignorar las voces que nos rodean, nos juzgan y nos valoran por cómo nos vemos y nada de malo tiene si algún día nos dejamos de influenciar por ellas. No hacen sentir mal, pero pensar que obramos mal nos hace caer en el juego de la culpa al que siempre se nos ha tenido sujetas. Como personas, tenemos derecho a mirar con compasión y establecer los límites que sean necesarios. De aquí nace el autocuidado. El cuerpo es algo que se cuida: se alimenta, se nutre y se ejercita para que sea cuidado. De aquí nace el amor: piensa en todas las cosas que te ha dado tu cuerpo. Al final de cuentas, todo lo que conoces lo conoces a través de él.

Comentarios

Deja tu comentario